Alicante se suma así a ciudades como Madrid o Bilbao, en un intento por favorecer la «intermodalidad» y el transporte sostenible
La posibilidad de combinar distintos métodos de transporte con la bicicleta es una de las grandes reivindicaciones de los ciclistas de la ciudad, ya que en estos momentos, por falta de espacio, solo pueden subirse a los autobuses las bicicletas plegables.
A partir de ahora los usuarios de los autobuses urbanos de Alicante podrán dejar sus bicicletas en la parte trasera de los autobuses.
Los autobuses urbanos de Alicante llevarán a partir de ahora un dispositivo para que los viajeros que lo deseen puedan colocar sus biclicletas antes de subir al autobús. El sistema portabicicletas va instalado en la parte trasera del exterior de los autobuses.
Los portabicicletas estarán controlados por el propio conductor a través de cámaras de vídeo que permiten saber cuándo los usuarios han recogido sus bicicletas después de bajar del autobús.
En otros países, como Canadá, que fue pionero en este sistema, se sitúan delante, ya que es más práctico para el ciclista y para el conductor del autobús, que tiene controladas las bicis en todo momento. No obstante, en España lo prohíbe el Reglamento de Circulación, por lo que se tienen que instalar detrás, con cámaras que permitan visualizar el dispositivo en todo momento.
Los soportes para bicicletas se probarán primero en los autobuses de dos líneas, para comprobar su eficacia y el uso que reciben. Si funciona, se extenderán al resto de líneas urbanas.
El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, ha explicado que muchos ciudadanos emplean las bicicletas para bajar al centro, «pero luego a la hora de volver a casa se hacía más complicado» como consecuencia de la orografía de la ciudad.
Benidorm en bici 